Wednesday, June 10, 2009

Confesional

a Criminal

Llegué a la puerta del edificio del pediatra y me quedé ahi repasando la conversación para ver si alguna palabra dicha al pasar diera espacio a pensar que no lo iba a traer. Con el correr de los meses y luego de alguna agarradas y un par de mediaciones aprendí a corroborar los planes cuarenta veces solo para después encontrarme con que una frase con sentido laxo le da pie a hacer lo que quiere. Vive así, en una flotación permanente del lenguaje donde el sentido no se arrastra de frase en frase sino que cada frase puede ser tomada por separado y adjudicarle un sentido propio.
Pero no, porque hace 20 dias que tiene la caldera rota y ha esperado que llegara el frio para fracasar en su intento de hacerla arreglar. Total, su estudio tiene estufa de tiro balanceado.
Asi que finalmente aparece caminando como un pato mojado, sabiendo que lo sé y que debe enfrentarse a la entrevista con el medico de Qponm que hará algunas preguntas que yo puedo contestar de manera tajante y hacer caer su papel de madre-que-no-puede-con-todo.
En la sala de espera jugamos con Qponm a la sopa de letras, le armo grillas de 5 letras x 5 letras y el descubre palabras y festejamos cada una de manera exagerada. Levanto la vista y la veo sonreír complacida y, sencillamente, se que ese movimiento de satisfacción rebota contra si misma de manera insoportable y la termina cometiendo barbaridades solo para aliviar la carga.
Pero yo tengo las de ganar hoy, porque el pediatra esta del otro lado de la pared y solo faltan diez minutos para que espere alguna respuesta de nuestra parte.
Pero al momento de la pregunta simplemente me quedo callado y la miro y la dejo balbucear un rato y el pediatra me mira y seguimos hablando él y yo.
Qponm parece estar sano, por lo menos por ahora.
Tomo la decisión interna de quedarmelo la próxima vez hasta que se mejore.
Bajamos juntos los tres. Qponm se queda conmigo y ya empezamos a boludear como lo hacemos habitualmente. Ella dice un hasta luego ni amor y a mi me suena como anacronico. Y me corre un frío por la espalda porque no me suena dirigido a Qponm y parece que a él tampoco porque tengo la vista clavada en el niño y este no se inmuta.Y un segundo después se acerca ruburizada para, después de tres años, darme un beso en la mejilla. Y se queda ahí, sin respuestas. Y yo tomo toda la actitud como un gesto de agradecimiento por no haber revelado su falta. Un gesto de agradecimiento de una mujer con problemas serios.
Y la veo alejarse con su andar de pato, ahora turbada y sola y siento una profunda y genuina lástima.

4 comments:

gataflorita said...

Ahhh, hacía una punta de años que no pasaba por aquí. Actualizó de golpe, como siempre!.

Que tremendo sentir lástima por la persona con la que uno estuvo; y sobre todo si, además, tuvo con hijo con ella. Tremendo para uno y para el otro.

Menos mal que pudo tener ese gesto de piedad. Feo y todo, ese sentimiento es mucho mejor que el odio que muchas veces gana en estas circunstancias...bah, digo yo.
Saludos. El post de Judíos en el espacio es imperdible!

Nanook said...

Gracias. Es lo que hay. En ambos sentidos.

Un Beso

Manón said...

a veces, cuando lo que se dice no es lo que se dice, sino lo que se escucha es un laburo agotador la comunicación.

(me quedo pensando que una casa sin caldera se soluciona más o menos con más ropa de abrigo, el problema mayor es un envase de madre sin contenido de madre y quizás es más por la falta de ese calor que se enferme un hijo)

abrazo a qponm y a su papá.

Nanook said...

Gracias por sus palabras Manon, pero realmente creo que el problema no es la imcapacidad para reconocer que, evidentemente, no es lo que cree.